El club sabioteño ha anunciado la llegada de Álvaro, Cabrejas, Hugo, Chema, Álex y Mario que, junto con la renovación de Fernando y Messy, empiezan a dar forma a un nuevo e ilusionante proyecto deportivo.
La llegada de Luis Matías al banquillo del Atlético Sabiote ha supuesto una verdadera revolución en la plantilla. A las renovaciones anunciadas en estas dos semanas, se han unido otros siete nuevos rostros que, en su mayoría, son realmente jóvenes.
Fernando confirma que continúa en el equipo otra temporada. Su compromiso con el equipo y su entrega en el campo le han valido para ir ganando peso en la plantilla.
Messy completó un trabajo excelente durante la pasada temporada, llegando a jugar de titular en muchos partidos y protagonizando grandes intervenciones que le han valido una renovación.
En el capítulo de fichajes anunciamos el regreso de Cabrejas que, tras su paso por el Villacarrillo CF de la Primera Andaluza, volverá a dar todo su potencial en la línea defensiva del Atlético Sabiote.
Junto a él, se incorporará Mario, un central de grandes prestaciones defensivas que fue referente en el Úbeda Viva y que regresa a los terrenos de juego después de un par de temporadas inactivo.
Álvaro Sánchez será otro de los refuerzos defensivos del equipo. Sabioteño de cuna, se ha formado en las categorías inferiores del Úbeda Viva. A sus 17 años aporta versatilidad, potencia y entrega.
Álex de la Obra se incorpora desde el CD Torreperogil juvenil para reforzar el ataque sabioteño desde los extremos. Su agilidad y gran capacidad goleadora le hacen un jugador realmente interesante.
Desde este mismo equipo se incorpora Hugo, un medio centro de garantías que con 17 años llegó a disputar minutos en Tercera RFEF con el CD Torreperogil de Torres. Descaro y puro talento son sus sellos de identidad.
Finalmente anunciamos la llegada de Chema, un interior derecho de 23 años que ha militado en varios equipos de nuestra provincia como Rus EF, CD Quesada, CD Arquillos y CD San Valentín Patrón. En sus cualidades cabe destacar la velocidad y el desborde.